La inclusión de la soja en rotaciones arroceras en la región Este ha generado incertidumbre sobre su efecto en la calidad del suelo y la productividad a pesar de los beneficios asociados, como el control de malezas y el traslado de costos del laboreo y productividad en el cultivo de arroz, sobre todo en sistemas donde no se incluyen pasturas permanentes. El objetivo de estudio es evaluar el impacto de la descompactación mecánica y el riego en el rendimiento del cultivo de soja, así como la calidad física del suelo en sistemas de siembra directa, considerando diversas rotaciones arroceras. Para eso se implementarán parcelas experimentales utilizando un diseño de bloques completamente al azar. Se llevará a cabo en el experimento de largo plazo de rotaciones arroceras, con el objetivo de comprender la relación entre rotaciones, riego y escarificación del suelo. Además, se implementarán parcelas observacionales con el fin de validar estas tecnologías a escala comercial. Este proyecto es crucial para la región Este, ya que proporcionará información objetiva sobre cómo la pérdida de pasturas perennes en la rotación puede afectar la calidad física del suelo y la productividad del cultivo. La introducción de prácticas como el laboreo vertical y el riego en la soja destaca la necesidad de comprender el impacto relativo de estas variables para reducir la brecha de productividad en el cultivo de soja en la región.