Repasar los productos y metas logradas en estos 47 años de trabajo en conjunto primeramente entre el CIAAB, Centro de Investigaciones Agrícolas Alberto Boerger, luego el INIA desde su creación (1990) y la Sociedad Rural de Río Negro, conformaron una excelente oportunidad para celebrar los 100 años de la Sociedad Rural de Río Negro, el pasado 22 de mayo.

En las propias instalaciones de la Sociedad Rural de Río Negro y con la concurrencia de técnicos de la zona, productores vinculados, representantes institucionales y autoridades, se llevó a cabo una jornada de reflexión sobre los productos que ha dejado este acuerdo de trabajo y los desafíos para continuar por esta alianza que produjo datos para la investigación, validó, sirvió de plataforma regional de trabajo, dinamizó actores y promovió el desarrollo institucional y productivo.

Este convenio al que hacemos referencia nace oficialmente en 1972, cuando un productor de la zona de Young, Roberto "Boby" Symonds hiciera su tesis de grado en La Estanzuela y luego continuara con la responsabilidad de evaluar pasturas en la zona de Young.  La regionalización del CIAAB y la necesidad de ampliar el área de trabajo fuera de las estaciones experimentales fueron los detonantes para comenzar una relación de apoyo mutuo, que basado en la necesidad de expandir las estaciones experimentales y obtener y validar datos en otras zonas agroecológicas, hicieron nacer la Unidad Experimental de Young, Ing. Luis Garmendia (UEDY). Unas 194 hectáreas, a pocos kilómetros al norte de Young, que dividida por la Ruta 3 definía dos áreas de campo que reuniría en futuro dos "sistemas" productivos en unos 23 potreros.

Obviamente, la pujanza de la SRRN y los productores socios, llegaron en momento fértil donde se proponía un dinamismo diferente desde la investigación.

​Las autoridades presentes de ambas instituciones reconocieron el trabajo e impacto logrado en estos casi 50 años de convenio y apuestan a generar un nuevo convenio que pueda volver a integrar trabajos, desafiar la creatividad para plasmar en los campos de la UEDY proyectos que validen tecnologías para los tiempos presentes, pero también soñar con desafíos futuros, con capacitación, con actividades de difusión y transferencia que sigan dinamizando la zona y los actores vinculados. "Adaptado al mundo que se viene"… "más de lo mismo no"… "apostar a los jóvenes", son algunos de los conceptos que el Ing. Rafael Secco, indicó como desafíos de futuro para el nuevo marco del convenio. Por el lado de INIA, el Ing. Montossi, Director Nacional de INIA, coincidía con los anteriores conceptos y sumaba la necesidad de "tener productores cada vez mas informados" y estar atentos a que las "instituciones están constantemente interpeladas" y que deben trabajar por metas y lograr impactos, lo que sin duda es otro de los elementos a considerar en el posible nuevo futuro.