Las emisiones de metano de nuestra ganadería de carne no inciden en el cambio climático.
En un artículo anterior(*) planteábamos que la estabilidad mostrada en el largo plazo por el stock ganadero alimentaba una hipótesis de equilibrio en el flujo neto de metano. Si esto se verifica, decíamos entonces, "la ganadería de los pastizales del Río de la Plata probaría su inocencia frente a las acusaciones de contribuir a la destrucción del planeta".