Sistema de gestión del alperujo
Resumen ejecutivo
La olivicultura en Uruguay creció exponencialmente en los últimos 15 años, alcanzando las 7000 ha plantadas y más de 25 plantas de elaboración de aceite de oliva (almazaras). Acompañando el crecimiento de la producción nacional de aceite de oliva virgen (AOV), se da el aumento en el volumen de residuos generados por las almazaras. Este residuo, llamado alperujo, está compuesto por el agua de vegetación (alpechín) más la pulpa y el carozo molido (orujo), y ambas fracciones representan entre el 80 a 85% del volumen total de aceitunas procesadas, mientras que el aceite representa el restante 15 a 20%. La disposición del alperujo se ha estudiado fuertemente en los países productores tradicionales de olivo, donde gracias a su clima seco, el alperujo es depositado al aire libre logrando reducir su humedad para el posterior uso o procesamiento. Otra alternativa adoptada en los países tradicionales es el procesamiento del alperujo en industrias llamadas Orujeras, que agotan el aceite remanente en este material, obteniendo el denominado Aceite de Orujo, esto soluciona el tratamiento del alperujo, ya que se obtiene un residuo agotado y seco que puede utilizarse como material combustible. Sin embargo en nuestras condiciones climáticas y de producción de AOV, esas opciones no son posibles y la correcta gestión de esos residuos es un desafío. En Uruguay, la alta humedad relativa y las precipitaciones otoñales, momento en que se genera el alperujo, hacen que la disposición al aire libre presente un alto riesgo de contaminación de fuentes de agua al ser arrastrado por la lluvia. A su vez, debido a que las almazaras se encuentran alejadas unas de otras y distribuidas en todo el país, y que el alperujo presenta una consistencia semisólida que encarece su transporte, se plantea la necesidad de generar una estrategia de tratamiento y valorización del alperujo en el propio establecimiento o almazara que lo genera. En este sentido, la estrategia más simple y de baja inversión estudiada por INIA fue el compostaje, práctica que ha sido valorada por su potencial por los almazareros. El compostaje permite devolver nutrientes y materia orgánica a las plantaciones cambiando el paradigma de “residuo a coproducto”. En este proyecto se busca difundir herramientas para la gestión del alperujo mediante el compostaje.
Equipo técnico INIA
HUGO BIANCHI
ANA CONDE
ANDREA FASIOLO
GEORGINA GARCIA
CAROLINA LEONI
IRVIN RODRIGUEZ
MONICA TRUJILLO
JUAN VILLAMIL
Instituciones participantes
Asesor/es Privado/s
ASOLUR
ASOLUR
Productor/a privado/a
Productor/a privado/a